¿Que es un filtro de habitáculo?
Durante un trayecto de 1 hora pueden entrar en el habitáculo hasta 540.000 litros de aire. Imagínate la cantidad de suciedad y polvo que esto conlleva. Ahora, imagínatelo entrando en tus pulmones. No es una imagen agradable, ¿verdad?. De hecho, el aire del interior de un vehículo alcanza una concentración hasta cinco veces mayor de gases de escape, contaminantes y alérgenos que en el exterior. Los filtros de habitáculo eliminan hasta el 90 % de las partículas nocivas, incluso de tamaño minúsculo (de hasta 1 µm de tamaño), creando una barrera protectora entre los pasajeros y el aire contaminado del exterior.
Un filtro de habitáculo separa casi todas las partículas finas PM2,5 (hasta un 95 %): los alérgenos provenientes del polen, los gases de escape, el humo, las emisiones de combustibles fósiles y otras partículas provenientes del desgaste de los frenos, los neumáticos y la propia carretera. Este tipo de partículas equivalen al 3 % del diámetro de un cabello humano. Esto demuestra lo potente y eficaz que es un filtro de polen.
El mantenimiento periódico del filtro de habitáculo es vital para mantener el aire limpio dentro del vehículo. Su sustitución debe realizarse una vez al año o cada 15.000 km. Para optimizar el aire limpio dentro del vehículo y mejorar la experiencia de conducción, respeta los periodos de mantenimiento de tu filtro de habitáculo.
FUENTE: MANN-FILTER